Según lo dispuesto por la Justicia, el relevamiento “deberá desarrollarse con intervención de los responsables de cada área relevada y comprender —como mínimo— los elementos de la biblioteca y el museo, archivos de fotografía, audio y video, escenografía, vestuario, sastrería, zapatería, peluquería, pinturas, artesanías, esculturas, cortinados, tapicería, artefactos lumínicos, instrumentos musicales y el telón”. A su vez, “deberá tenerse en cuenta tanto los bienes alojados en el inmueble del coliseo como los que puedan encontrarse depositados en otros edificios”.
La sentencia responde a un amparo colectivo impulsado por seis empleados del Teatro Colón, entre ellos el ex delgado Máximo Parpagnoli, que reclamaron medidas de protección del patrimonio histórico, cultural y artístico del mismo.
El juez Guillermo Scheibler, titular del juzgado N°13 en lo Contencioso Administrativo y Tributario de la Ciudad, entendió que Ejecutivo local y el Ente Autárquico Teatro Colón “han incurrido en una omisión ilegítima en el deber de preservar y proteger el patrimonio cultural con la consiguiente afectación a la posibilidad de ejercer los derechos culturales consagrados tanto en la Constitución de la Ciudad como en los pactos internacionales”.
“Dicha omisión ha quedado en evidencia tras el análisis de los diversos elementos de prueba reunidos en el legajo durante todo el trámite de la causa y, particularmente se ve resaltada por el incumplimiento del compromiso asumido en marzo de 2015 de elaborar y acompañar el inventario de los bienes de relevancia cultural o histórica e informar las medidas adoptadas para su resguardo y preservación”, sostuvo el magistrado en los fundamentos de su fallo.
A su vez, Scheibler afirmó que esa omisión “impacta en diversos aspectos del derecho a participar de la vida cultural, conspira contra la conservación de importantes bienes culturales -ya que la falta de una individualización del patrimonio mueble constituye un peligro para su preservación. Y al no encontrarse debidamente individualizados los bienes muebles patrimoniales del Teatro, no es posible acceder a ellos, conocerlos, exhibirlos, investigarlos, en síntesis, disfrutarlos de las diversas maneras en que ello es posible”.
El juez Scheibler le dio 30 días de plazo al Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires y al Ente Autárquico Teatro Colón para presentar un pan de trabajo que deberá cumplir en un máximo de seis meses. Una vez concluido deberán establecer medidas “para exhibir, difundir y/o poner a disposición del público, artistas, investigadores, etc. el patrimonio mueble protegido”.
Finalmente, y debido a que “los derechos involucrados en el caso revisten un indudable carácter colectivo”, el magistrado dispuso “medidas tendientes a dar debida publicidad y difusión” de la acción de amparo y de la sentencia dictada “a fin de resguardar el derecho de defensa y el debido proceso de todas aquellas personas que puedan tener interés en el resultado del litigio y en participar en instancias ulteriores”. La información fue dada a conocer por Ijudicial.
