FAE 2025: Habitar la arquitectura y construir comunidad desde México

EL FESTIVAL DE ARQUITECTURA EN ESPAÑOL SE CONVIRTIÓ EN UN ESPACIO DE ENCUENTRO, LLENO DE EXPERIENCIAS Y RECORRIDOS A TRAVÉS DEL LEGADO DE LA ARQUITECTURA MODERNA EN MÉXICO


El Festival de Arquitectura en Español (FAE) 2025 convirtió a la Ciudad de México en un punto de encuentro entre el legado moderno y voces influyentes de la práctica contemporánea. Durante el 4 y 5 de septiembre, el festival reunió a arquitectxs y profesionales de distintas partes de la República en dos sedes emblemáticas: Los Manantiales, en Xochimilco, y la Planta Bacardí, en Tultitlán. Más que un ciclo de conferencias, el FAE se consolidó como una experiencia integral donde el patrimonio construido y la conversación abierta fueron lxs verdaderxs protagonistas.

Habitar y recorrer el patrimonio

Uno de los momentos más reveladores fue el recorrido por la Planta Bacardí, el único proyecto de Mies van der Rohe en México. Transitar su nave industrial y el edificio de oficinas ofreció a lxs asistentes una experiencia completa: habitar de primera mano la materialidad, la escala y la concepción espacial de una obra singular del arquitecto alemán, al igual que Los Manantiales y los Paraboloides Hiperbólicos de Félix Candela mostraron cómo estos proyectos de la arquitectura moderna trascienden el tiempo y se mantienen activos. 

Este contacto directo con las obras —ver cómo funcionan hoy y cómo dialogan con su contexto— enriqueció al festival más allá de las ponencias, convirtiendo los recorridos en ejercicios de aprendizaje encarnado.

Arquitectura para todos los sentidos

Desde Los Manantiales, Mauricio Rocha ofreció una conferencia que resonó especialmente entre lxs presentes. Retomando a Juhani Pallasmaa y Carlos Mijares Bracho, así como la influencia de su madre, la fotógrafa Graciela Iturbide, Rocha subrayó la necesidad de concebir una arquitectura que no se limite a la mirada: “centrarse únicamente en la vista aplana la realidad”. Propuso, en cambio, un diseño que convoque todos los sentidos y que se habite con el cuerpo entero.

Su reflexión abrió un espacio de reconocimiento hacia lo multidisciplinar como base de la práctica arquitectónica: la fotografía, la literatura, el arte y otras disciplinas como fuentes que nutren el pensamiento y amplían la sensibilidad del arquitectx. 

Diálogo intergeneracional

El diálogo entre generaciones se hizo evidente durante la cena del 5 de septiembre en la Planta Bacardí, a cargo del chef Miguel Sánchez Navarro (CARDO). Allí, diversas voces compartieron no sólo su perspectiva sobre las conferencias, sino también experiencias íntimas sobre el oficio. Durante la conversación sobre la complejidad del diseño y el rigor del proceso, apareció una conclusión: Este tipo de festivales son también un recordatorio de por qué hacemos arquitectura, y de la necesidad de reconciliarnos con el goce del proceso creativo a pesar de sus desafíos.

Los traslados y recorridos se convirtieron en pretexto para dialogar más de cerca con colegas y maestros, y para hacer preguntas sobre procesos y decisiones de proyecto que no se dan a conocer de manera frecuente.

Nuevas miradas, viejos oficios

Entre los invitados internacionales del FAE 2025, destacó Ryue Nishizawa (SANAA), quien con cercanía y sencillez respondió las preguntas de lxs asistentes pese a la intensidad de la jornada. Su presentación renovó la reflexión sobre diferentes temas y subrayó un aspecto poco común en tiempos dominados por el software y la digitalización: la manera en la que, desde su práctica, el proceso creativo sigue siendo profundamente manual y experimental, apoyado en maquetas físicas que permiten pensar el espacio desde la materialidad y la intuición.

Impulso a lo emergente

El festival también fue escenario de la entrega del Premio Félix Candela – Volumen 7: BABEL, dedicado a jóvenes arquitectos y estudiantes. Con el tema de los espacios de encuentro y apertura espiritual, la edición reafirmó el interés del festival por impulsar nuevas visiones con criterio. A esto se sumó “Descubrimientos”, la nueva plataforma para arquitectxs emergentes hispanohablantes, quienes presentaron su trabajo ante un jurado y obtuvieron visibilidad dentro de la programación.

Una comunidad en construcción

El FAE 2025, organizado por el Instituto Español de Arquitectura (IESARQ) bajo la dirección de Jesús Rubio y Cynthia de Jesús, logró tejer un espacio de convivencia y pensamiento donde los límites entre trayectorias y geografías se desdibujaron. El festival no se entendió como un evento aislado, sino como una plataforma en expansión que vincula el pasado del Movimiento Moderno con prácticas actuales de la disciplina, al tiempo que impulsa a quienes esperan abrirse camino en ella.

Más que un ciclo de discursos, el FAE propuso experiencias: recorrer obras emblemáticas, escuchar la voz de sus protagonistas y, al mismo tiempo, una idea importante: que la arquitectura no se reduce a la forma o al espacio; pues su potencial está en la capacidad de tejer vínculos y construir comunidad a través de festivales y encuentros como este. 

Temas:
submarcas_HR-03
submarcas_HR-04
submarcas_HR-01
submarcas_HR-02