Tradiciones enraizadas de naciones de Latinoamérica y el Caribe buscan hoy aquí ser incluidas en la Lista Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Unesco.
Será en la tercera jornada de trabajo del Comité Intergubernamental para la Salvaguardia del Patrimonio Cultural Inmaterial del organismo internacional que sesiona en Paraguay con la participación de más de un centenar de países.
Guatemala defenderá la técnica de realización de los que se consideran los mayores barriletes o papalotes del planeta, cuyos colores vivos encienden el cielo en festividades de las localidades de Sumpango y Santiago Sacatepéquez del país centroamericano.
Cuba, Dominicana, Haití, Honduras y Venezuela presentarán las prácticas, conocimientos y consumo del casabe, que desde la época anterior a la colonización española constituía parte de la dieta de sus pueblos aborígenes.
También de la yuca o mandioca está en competencia el Attiéké, plato tradicional de Costa de Marfil, hecho a base de pulpa de ese tubérculo, fermentada y rallada, que se seca y cocina al vapor o en caldo
Otro alimento viene de Sudamérica en busca de reconocimiento. Se trata del queso artesanal oriundo del estado de Minas Gerais, en el sudeste de Brasil.
Los Cuadros Vivos de Galera llegan desde el departamento colombiano de Sucre, cuyos habitantes son los hacedores y modelos de estas estampas vivientes.
La caribeña y pequeña Granada postula su carnaval de Máscaras de Shakespeare de Carriacou, mientras que Jamaica está presente con la Peregrinación a Watt Town, ritual de culto a un sitio sagrado de su geografía donde se refugiaban los esclavos africanos.
Para Paraguay resultó histórico que la Unesco reconociera la víspera al ritmo musical nacional Guarania como parte de la lista del patrimonio cultural intangible de la humanidad.
También fueron aceptadas diversas manifestaciones inmateriales de Tailandia, Siria, Arabia Saudita; de Noruega, Suecia, Palestina, Serbia, República de Corea y Portugal.
El foro analizará en esta jornada postulaciones de vestimentas de varios países, entre ellos Brunei, Malasia, Indonesia, Singapur y Tailandia, que presentan la tradicional blusa Kebaya.
En esa línea Cambodia postula el Krama, Argelia el Gandoura y Melhfa, y Ghana el Kente.
Danzas de Zambia, Albania y Hungría quieren enriquecer la lista Unesco, al igual que la cultura de la sidra asturiana y el sake japonés elaborado con el moho koji.
Son apenas atisbos de la riqueza cultural atesorada por la humanidad que tiene en esta cita de la Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura una especie de pasarela a favor de su resguardo y universalidad.